Básquet

Cambio climático

Dejando por un momento de lado el básquet, Juan Manuel Cóseres, habló sobre lo que significó trasladarse de ciudad. Entre aspectos positivos y negativos, da a conocer su experiencia en su nuevo lugar de residencia.

Cambio climático

Más de 2800 kilómetros son los que separan Río Grande, su lugar de nacimiento, de la Ciudad de Buenos Aires. La ciudad se ubica sobre la costa del Mar Argentino, en la provincia de Tierra del Fuego. Desde allí, Juan Manuel se trasladó para incorporarse a la UP.  

-¿Fue muy difícil la adaptación a vivir en otra ciudad tan distinta?
-El cambio de ciudad fue bastante duro, allá la temperatura promedio de todo el año es de diez grados más o menos. Acá la temperatura varía mucho, lo cual produjo que me enferme seguido.

-¿Qué es lo que más disfrutas de hacer acá?
-Una gran ventaja que tiene Buenos Aires es poder jugar al básquet al aire libre, cosa que en Tierra del Fuego es imposible, te morís de frío, no se puede ni entrenar.

-¿Cuál es el mayor cambio?
-Algo que sin duda no se extraña es el viento. A pesar de que en algunos períodos del año pueda subir un poco más la temperatura, en unos quince o dieciocho grados, si hay viento te mata, complica mucho.

-¿Se puede retornar en vacaciones?
-El año pasado pude volver a mi ciudad para las vacaciones, pero este año preferí quedarme acá. Me dediqué a seguir entrenando para ponerme más en forma, mejorar piernas sobre todo. En algún futuro cuando vuelva podré jugar con mis amigos, algún amistoso o partido callejero, que eso es lo que más me gusta hacer.   

Publicada: Miércoles 30 de septiembre de 2015