Planificar la mudanza de la empresa

Sergio Giannice, profesor de Logística Comercial del Centro de Estudios para el Desarrollo Exportador (Cedex) es consultado sobre qué hay que tener en cuenta a la hora de mudar una empresa.

1 Evitar el traslado paulatino
“Muchas veces, razones operativas obligan a la empresa a realizar el traslado de una planta a la otra en forma gradual. Esto implica períodos de convivencia con producción y administración repartida entre ambas plantas, lo cual suele generar problemas en la gestión y una carga de trabajo adicional para quienes gestionan la empresa”, explica Sergio Giannice, profesor de Logística Comercial del Centro de Estudios para el Desarrollo Exportador (Cedex) de la Universidad de Palermo. Sin embargo, para Diego Meischenguiser, CEO de Perramus, que experimentó una mudanza el año pasado, mantener los dos lugares en simultáneo puede ser útil, ya que es un período en donde puede empezar a mudarse por sectores sin necesidad de dejar el espacio anterior. “El tiempo requerido para la realización de la mudanza también es un factor determinante, ya que puede implicar que la fábrica esté parada o improductiva, requiriendo el análisis de la conveniencia o no del traslado en función a la posibilidad de realizarlo por etapas o la necesidad de tercerizar parte de la producción por un período determinado de tiempo”, agrega Sebastián Gebara, director del Programa Intensivo para Emprendedores de la Escuela de Negocios de la Universidad Católica Argentina.

2 Que nada cambie
Para Gebara, es importante inscribir el cambio del domicilio social e impositivo y comunicar el cambio a otros organismos con los que la empresa pueda interactuar, así como a bancos, proveedores y clientes. Esto es clave para poder recibir cualquier tipo de notificación, pedido o comunicación. En la misma línea, Giannice pone el acento en no olvidar la puesta a punto de los sistemas informáticos y las comunicaciones, ya que se pueden convertir en una problemática habitual, que complica el inicio de la gestión en la nueva planta. Por eso recomienda realizar ensayos de funcionamiento varios días antes de realizar la mudanza.

3 Bien específicos
“Muchas empresas se valen de su propio personal para realizar la tarea de mudanza. Así, el personal se ocupa de preparar el material a enviar, colaborar en el acarreo y reubicarlo en la nueva planta. Esta dedicación, en muchas, ocasiones ralentiza el proceso de puesta en marcha”, explica Giannice. En Perramus, cada sector de la empresa fue responsable de mudar sus propias cosas, es decir, de embalar en el viejo establecimiento y desembalar en el nuevo, para mantener un orden. Para el profesional de la UP, la asistencia de personal específico para que colabore en el traspaso físico de los bienes, acelera el proceso de puesta en marcha de la nueva planta. Incluso existen empresas dedicadas a colaborar en esta labor, quienes aportan no sólo experiencia, sino también contenedores especiales para el acarreo, entre otras cosas.

4 Orden y progreso
Giannice señala que no se debe omitir la correcta rotulación del material al momento del embalado. Esto evita errores y facilita el desembalado y la puesta a disposición en la nueva planta. Asimismo, se deberá hacer un completo back up de todo el material informático de la empresa. “En el nuevo establecimiento ya debe estar pensado dónde va a ir cada cosa, estudiado y consensuado previamente con el responsable de cada sector”, agrega Meischenguiser.

5 El dinero, presente
“La puesta en marcha y aprovechamiento de la capacidad de una nueva planta puede requerir un tiempo prolongado, por lo que va a ser recomendable que el endeudamiento para financiarla sea de largo plazo”, asegura Gebara. Por eso, para el CEO de Perramus, intentar hacer la mudanza en una etapa de tranquilidad de la empresa es la mejor opción.

Facundo Sonatti