
La Casa de Ronald es un hogar para las familias del interior del país que tienen hijos que están en tratamientos médicos prolongados por cáncer, trasplantes u otras patologías de alta complejidad en el Hospital Italiano de Buenos Aires.
Con los Voluntarios UP, los chicos pudieron distenderse y pasar una linda tarde rodeados de alegría y juegos. Primero, los Voluntarios UP tuvieron que entrar en confianza con los niños y para eso el pato ñato fue el juego elegido. Después, fue el turno de jugar a la “mancha zombie” y algunos otros juegos con la temática de Halloween.
Para terminar la tarde y las actividades propuestas por los Voluntarios UP, los chicos de la Casa pintaron con acrílicos y témperas banderines para luego colgar donde ellos quisieran. A falta de pincel, las manos fueron la mejor, y más divertida, opción.
“Ha sido una experiencia bastante gratificante. Es la primera vez que hago un voluntariado y me he divertido un montón. Lo que más me gustó fue compartir la tarde con los niños”, dijo Maríajose Urreiztieta, estudiante de la carrera de Humanidades y Ciencias Sociales.