Neil Rodrigo Jiménez Cifuentes, MBA UP, Senior VP Head of Accounts en Asylum Marketing

“Yo creo que uno siempre debe tener claro tres elementos: el ser, el saber y el hacer para poder liderar”. Neil Rodrigo Jiménez Cifuentes, MBA UP, Senior VP Head of Accounts en Asylum Marketing
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“El liderazgo tiene mucho de dejar en la gente enseñanzas”, sostiene Neil Rodrigo Jiménez Cifuentes, quien estudió la Maestría en Dirección de Empresas UP y desde hace dos años se desarrolla como Senior VP Head of Accounts en Asylum Marketing, Colombia. Con una trayectoria de más de 25 años en la industria del Marketing, Rodrigo consolidó una carrera profesional llena de logros: empezó en Asylum como Country Manager, luego fue VP para Latinoamérica y hoy es Head of Accounts. Además, entre sus pasos profesionales, dedicó buena parte al área educativa: fue director de la carrera de Publicidad y director de Posgrado en la Universidad Autónoma de Occidente en Cali, Colombia. Según cuenta en esta entrevista, su formación en el MBA UP le brindó mucho aprendizaje y le permitió abrirse camino en el mundo de los negocios para convertirse hoy en el líder que es.

¿Qué implica tu rol como Senior VP Head of Accounts en Asylum Marketing?

Actualmente lidero la operación de cuatro unidades de negocio que en conjunto agrupan a un equipo de aproximadamente 25 personas distribuidas en diversos países de América Latina. En Asylum trabajamos con una cartera de más de 40 clientes activos, y mi principal responsabilidad es asegurar que cada miembro del equipo comprenda a profundidad el negocio de nuestros clientes, para así poder agregar valor estratégico en cada punto de contacto.

Esto implica no solo mantener relaciones sólidas y sostenibles, sino también identificar oportunidades de crecimiento, incrementar la facturación y ampliar nuestra participación en cada cuenta. Dedico una parte importante de mi tiempo a visitar mercados y reunirme directamente con los clientes, con el objetivo de entender mejor sus retos, dinámicas locales y oportunidades, lo cual nos permite operar con mayor precisión y adaptabilidad. Mi enfoque está en garantizar que los negocios que manejamos se operen con excelencia, se mantengan en el tiempo y escalen de forma rentable y sostenible.

¿Qué desafíos se encuentran liderando una empresa de marketing de primer nivel?

Sostener los negocios y hacer que crezcan es un desafío constante. Los principales retos del equipo están en identificar cómo aportar valor real en cada etapa de la relación con el cliente, lograr un crecimiento sostenido en facturación y transformar esa relación en nuevas oportunidades. Para eso, debemos entender profundamente el negocio de nuestros clientes. Trabajamos con industrias como pharma, automotriz y belleza, y en todas hay que estar atentos a lo que viene, anticiparse a los movimientos del mercado y detectar oportunidades antes que nadie. Se trata de tener un olfato comercial afilado. La fórmula es simple: generamos confianza, cultivamos relaciones sólidas y nos volvemos aliados estratégicos. El networking en esta industria es clave, y por eso el seguimiento, la presencia y la proactividad marcan la diferencia.

¿Qué es lo que más te apasiona de tu carrera?

Me apasiona profundamente el desarrollo de negocio y comprender a fondo el funcionamiento de las distintas industrias de nuestros clientes. Tenemos la fortuna de trabajar con marcas de diversos sectores y regiones del mundo, lo que me permite aprender constantemente y nutrirme de múltiples realidades empresariales. En nuestra compañía operamos bajo un modelo ejecutivo, y en mi caso particular, tengo un perfil muy orientado a la planificación estratégica. Esa combinación entre visión estratégica y diversidad de contextos es lo que más disfruto de este rol, porque cada día representa un nuevo desafío y una oportunidad diferente para generar impacto.

¿Qué habilidades crees que debe tener un buen líder de equipo?

Creo que uno siempre debe tener claro tres elementos: el ser, el saber y el hacer para poder liderar. Tienes que tener el saber, tienes que tener conocimiento para poder tener autoridad, para poder opinar, eso te genera el conocimiento. Te da criterio. Pero también tienes que entender el hacer porque no te puedes quedar en la teoría, tienes que saber implementar. Esas dos cosas se enseñan o más bien se aprenden. Como líder me preocupo mucho para que tengan ese equilibrio. Tienes que pensar mucho en la gente. Un líder es el que empodera a la persona, es el que empuja a los demás a que lo puedan hacer muy bien. El liderazgo tiene también mucho de dejar en la gente enseñanzas. Creo que esa es la clave para mí. Cuando tú ves que la gente empieza a evolucionar en su plan de carrera, es cuando sientes que estás también dejando un legado y estás haciendo algo porque la gente avanza y eso te muestra la estabilidad, pero también la proyección que ellos tienen. Cuando le das eso a la gente desde tu liderazgo, estás quitando todo egoísmo, estás siendo empático, estás siendo cercano, estás generando confianza. El grupo humano es lo que más importa.

¿Cómo ves a futuro el área de marketing en las empresas?

Creo que la clave de enfrentar el futuro del marketing es tener mucha capacidad de adaptarse, ser muy flexible. Todo este tema de la inteligencia artificial generativa que empezamos hace dos años y medio, es un boom. Y no es una moda, es el “way of working” de los próximos 15 años. La IA vino a automatizar procesos que te quitaban tiempo. Está obligando a registrar metodologías. Antes las teníamos muy volátiles. El éxito de todo lo que viene con todos estos procesos de automatización es muy abierto a la transformación tecnológica. Creo que para entender el futuro, simplemente es tener total apertura y confiar. El marketing pertenece a un modelo de consumo. Y creo que al final, hay un reto bonito de los que estamos de este lado y es que hoy en día la gente que está al frente de las compañías está más sensibilizada a eso. Creo que esa es la clave.

¿Qué consejos le darías a la nueva generación de profesionales que quieren destacar en el marketing digital?

Tienen que salir a comerse el mundo, o sea, ser ciudadano del mundo. Si querés tener realmente oportunidad de crecer y entender esto, vas a tener que entender las regiones. Salí de la Argentina, salí de todos lados, salí a entender qué pasa en otras partes. Son los pequeños detalles que te generan carácter para que después tú puedas entender. A veces es necesario eso, incomodarse, salir de la zona de confort para justamente sacar provecho de esa situación. Te trae unas enseñanzas únicas.

¿Por qué elegiste la UP para realizar el MBA?

He tenido tres etapas profesionales en mi vida. Primero fui publicista, luego fui docente y ahora estoy full en la industria publicitaria. Soy profesional del marketing y la publicidad. En ese momento estaba en segundo semestre, y yo ya estaba trabajando en una agencia. Fui copy, fui gráfico, soy fotógrafo, soy músico. Fui director de radio y televisión. Trabajé con agencias y productoras. Una vez me llamaron de la Universidad Autónoma de Occidente, en Cali para que los ayudara con todo lo relacionado a la radio y televisión. Me fui por un proyecto de 4 meses y terminé 15 años en la empresa. Fui Director de posgrado y Director de la carrera de Publicidad. Ellos vieron un potencial en mí y estaban apoyando la formación en Programas de Maestrías. En Colombia, en esa época, no había Maestrías en Publicidad ni en nada de lo mío. Y por eso fue que llegué a UP. Cuando vi en la UP, la Facultad de Negocios, me fascinó. Apliqué y la empresa en la que yo trabajaba me mandó a Argentina en misión a estudiar. El MBA me abrió mucho la cabeza.

¿Cómo viviste la experiencia de estudiar el MBA?

Siento que todo el mundo debería estudiar administración independientemente de lo que seas. Con el MBA pasa lo mismo. Te abre en el mundo de los negocios, te abre las posibilidades a entender el entorno completo. El MBA es generalista, no es especialista. A mí me dio la base necesaria para que en esa generalidad yo pueda llegar a tener el paquete completo, ser “360” como diríamos en marketing. Lo bueno de hacerlo en la Universidad de Palermo es que yo fui estudiante extranjero y no solo que te abren la mente a entender los negocios, también la multiculturalidad de las personas. Además, Buenos Aires es un destino increíble. Lo que siempre valoré es el network y la Universidad de Palermo tiene un network increible, porque con esta herramienta es que tú entras, socializas y consigues las oportunidades.

¿Qué herramientas o habilidades te brindó el MBA a tu profesión?

Me llamaron de Asylum para ser el Country Manager. Primero fui Country Manager, luego fui VP para Latinoamérica y hace dos años soy Head of Accounts. Aquí realmente en este rol, en estos 8 años, es donde he aplicado mi MBA, donde he aplicado todo lo de la UP y todas las herramientas que aprendí: finanzas, la parte de recursos humanos, la parte de liderazgo, la parte de marketing, la parte administrativa y la parte contable. Soy publicista pero me baso en el número, procuramos tomar decisiones basados en data. Tuve profesores en la universidad increíbles que me metieron en el mundo de los negocios, o sea, a mí el mundo de los negocios me encanta. Evolucioné la educación a los negocios.

¿Qué reflexión haces de tu desarrollo profesional y cómo te proyectas a futuro?

Creo que algo que me gusta de mi carrera profesional es que hay mucho por hacer. No tengo un afán por salir buscar un reto fuera de la organización, sino que en este momento estoy concentrado en construir y dejar legado. Dejar procesos. Tenemos mucho por dónde hacer y mucho por dónde crecer. Uno a veces entra en un afán por trascender, piensa en nombre o en nombre de compañía y de pronto no se da cuenta que tú plan de carrera puedes tenerlo en la nariz porque uno se forma los planes dentro de las empresas. En donde estoy el potencial es muy grande, me gusta sentirme que tengo esa responsabilidad, de que puedo agregar valor. Con la cantidad de retos que tiene esta industria, es imposible aburrirte, es imposible que un día te quedes sin algo por hacer. Y hacia atrás, siempre vivo muy agradecido porque sé que he tenido muy lindas oportunidades, pero sé que no han sido suerte, las he tenido que trabajar, he tenido que visibilizar mi trabajo, he tenido que escalar cosas, he tenido que salir a buscarlas. Creo que la reflexión final es que es uno mismo quien define su futuro.

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